¿Cómo influye la alimentación en el cuidado de nuestra piel?

El envejecimiento de la piel

Entre nuestras mayores preocupaciones se encuentra el envejecimiento de nuestro cuerpo, y no solo por una cuestión estética. Es la piel el órgano donde primero se ven los signos del paso del tiempo, ya que éste actúa como barrera protectora entre nosotros y el exterior. Nos protege y nos ayuda de los factores externos, pero si no queremos que se vea resentida debemos darle los aportes nutricionales que necesita para que nuestra piel luzca perfecta. La salud se ha convertido en un argumento importante en la consulta de muchos expertos en nutrición.

Recomendaciones nutricionales para cuidar la piel

Charles Orrico, nutricionista deportivo y coaching nutricional de nuestro gimnasio comparte algunas recomendaciones para mejorar el aspecto de nuestra piel y, sobre todo, para mantenerla sana y que nos ayude a protegernos.

• Incluir en la dieta diaria alimentos ricos en vitaminas antioxidantes, como la vitamina C, A y E.
• Ingerir alimentos ricos en betacarotenos, que ayudan al organismo a producir vitamina A, algo fundamental en la salud de nuestra piel.
• Importante la vitamina C porque colabora en la protección de las células contra los daños causados por los radicales libres. Los cítricos contribuyen a obtener firmeza y elasticidad en nuestra piel. La encontramos en la col rizada, el pomelo, la mandarina, el kiwi, entre otros.
• Frutos rojos, porque tienen una capacidad antioxidante elevada y evitan la destrucción celular y el envejecimiento prematuro. En esta categoría estarían los arándanos, frambuesas, cerezas y moras.
• Las verduras, que siempre es recomendable a cualquier edad, ya que aportan vitaminas, minerales y antioxidantes.
• El consumo de suplementos sólo cuando no sea posible a través del alimento en su forma natural.

¿Qué no tomar para cuidar nuestra piel?

¿Qué alimentos no debemos tomar en exceso?

Una dieta poco adecuada puede afectar no solamente a nuestra piel, sino a nuestra salud en general. Podemos perder elasticidad y, con ello, la aparición de arrugas, provocando un envejecimiento prematuro. Por ello, hay que evitar algunos alimentos, como los refinados o procesados, ya que éstos ocasionan una oxidación precoz de las células.

El exceso de azúcar es el principal enemigo de nuestra salud y también de nuestra piel. Ingerir un alto grado de azúcar provoca arrugas, manchas y flacidez, ya que destruye las fibras de colágeno. Lo mismo ocurre con las bebidas azucaradas. Otro exceso que cometemos es el de la sal. Ésta es la responsable del aumento de la tensión arterial y, por consiguiente, reduce la producción de colágeno. Te recomendamos reducir la cantidad de sal de tus comidas, notarás rápidamente sus beneficios.

Además, también debemos reducir la ingesta de alcohol y de carbohidratos simples, y apostar por una dieta equilibrada y saludable para poder lucir una piel radiante.

Dos recetas para frenar el envejecimiento de la piel

Desde Fit Club Madrid queremos compartir la receta de dos smoothies, una bebida sana y rica en antioxidantes con efecto antienvejecimiento. La textura será entre un frappé y un granizado, ideal ahora que la primavera está a la vuelta de la esquina. Puedes tomar un vaso y consumir el resto a lo largo del día. ¡Toma nota!

Ingredientes:

• 400 ml de bebida vegetal (soja, coco, almendras) sin azúcares añadidos
• 125 g arándanos
• 125 g frambuesas
• 125 g moras
• 4 hielos grandes

Ingredientes:

• 125 g de arándanos
• Un mango entero sin piel
• 300 ml de tu bebida vegetal favorita (sin azúcares añadidos)
• Añade hielo antes de licuar la mezcla

Licuamos y ¡listo!

No debemos olvidar que, el secreto para tener una piel radiante y que luzca saludable, no solo basta con trabajarla desde fuera. El cuidado de la piel viene de dentro y, si incluimos en nuestra dieta los alimentos que hemos destacado, se verá beneficiada. Además, te aconsejamos que te mantengas siempre hidratado para que el organismo pueda eliminar fácilmente las toxinas, dormir el número de horas recomendado por los expertos y realizar actividad física de forma regular.